martes, 16 de junio de 2015

Atlántida Film Fest 2015: Todo parecía perfecto

Todo parecía perfecto

Director: Alejo Levis

Actores: Jordi Rico, Andrea Trepat y Clara Gali.

Guión: Alejo Levis

Productores: Ibon Cormenzana y Clara Lago.

Montaje: Alejo Levis

Fotografía: Pau Castejon

Música: Héctor Moras

Producción: Arcadia Motion Pictures


"A mi madre que me enseñó a no querer entenderlo todo", con ésta dedicatoria y a la vez declaración de intenciones acaba su film Alejo Levis, para dejar claro a los posibles espectadores insatisfechos que no siempre hace falta buscar una explicación para disfrutar de algo, que a veces las sensaciones que te pueden provocar son más importantes que las historias que te cuenten, que existen otros lenguajes (en el fondo la película está llena de momentos que te dan las "claves" de lo que está sucediendo) que no obedecen a lo que estamos habituados a ver, en fin, que el disfrute de la pequeña joya que es "Todo parecía perdido" requiere el dejarse llevar, abrir la mente a nuevas experiencias y estar dispuesto a disfrutar de la magia.

Un hombre sueña un encuentro con la mujer de su vida y ante la frustración que le produce el despertar y perder esa historia de amor decide recrear todos los elementos de ese sueño en la vida real para volver a recuperar a su amada, así comienza la historia de "Todo parecía perfecto" inmersa en una atmósfera evocadora en la que cada sueño se enmarca dentro de otro sueño lo que lleva a una historia desordenada, como el propio caos que impera en el mundo de los sueños sin ningún orden lógico aparente, así la historia carece de una narrativa clásica por lo que el disfrute del film requiere de la conexión del espectador con lo que está viendo de manera natural, ya que los simbolismos y el realismo mágico serán constantes protagonistas en la historia y lo que puede maravillar al que entre en el juego que propone Alejo Levis puede a la vez producir rechazo a los que miren con escepticismo la acción.



Cargada de referencias y homenajes a grandes directores, desde las más evidentes del colorismo fantástico de Jean Pierre Jeunet, pasando por el romanticismo melancólico de Gondry con su "Olvidate de mi" hasta ciertas escenas que recuerdan al gusto por lo onírico de David Lynch, "Todo parecía perfecto" es capaz de crear su propio lenguaje en el que lo real y lo irreal conviven en una suerte de sueño cubierto de magia en el que todo puede suceder y uno nunca quiere despertar.

Con un sorprendente acabado formal en el que nunca se evidencian la falta de medios gracias a la preciosista fotografía de Pau Castejón y la habilidad a la hora de mover la cámara de Alejo Levis, la cinta aprovecha su esplendida B.S.O y la enorme complicidad que desprenden sus protagonistas, perfectos ambos, tanto Jordi Rico en su papel de ingenuo soñador como una preciosa Andrea Trepat que borda su papel de desencantada pesimista que se deja arrastrar hacia el mundo mágico que le propone ese extraño que encuentra en un bar.



"Todo parecía perfecto" es un film tan fácil de admirar como de criticar, y es que depende casi exclusivamente de la visión personal que uno le de a la cinta, es decir, se pueden admirar sus aspectos formales e interpretativos pero su disfrute total depende de la implicación que se consiga en la historia y es que si te empeñas en buscar la trampa al truco perderás toda la magia, pero si te dejas llevar todo puede volverse maravilloso e impredecible, a mi particularmente me dejó con una sonrisa de bobalicón y la clara sensación de que es una historia que va a permanecer mucho tiempo en mi memoria.

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- Coleccionista de instantes cinematográficos
- AleuCine

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